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LA PALABRA
No.47, febrero de 2014 Publicación periódica de opinión. Responsables: Prof. Jesús Pacheco Martínez y Profra. Irma Clemencia Lara Martínez.
http://www.youtube.com/user/Lapalabrareflexion?feature=watchCandidatos a la Dirección General del CCH
La Secretaría General de la UNAM, a través de un oficio, hace saber al personal académico, alumnos y trabajadores administrativos, de la Dirección General de la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades, con fecha 10 de febrero y suscrito por el Dr. Eduardo Bárcena García, que los candidatos a la dirección general del Colegio, y de entre los cuales se integrará la terna correspondiente son:
Delgado González Arturo
Flores Lira Juan Antonio
Flores Suaste Jaime Galnares Campos Angélica García Palacios Ernesto Muñoz Corona Lucía Laura Muñoz Morales Raúl Rodríguez Chávez Miguel Ángel Salinas Herrera Jesús Terán Olguín Rito Zamora Arango Enrique Torre de Humanidades II y Edificio de Posgrado de Arquitectura
Plan de Trabajo 2014-2018 (Síntesis)
Mtro. Ernesto García Palacios
INTRODUCCIÓN
Ante un mundo complejo, globalizado, cambiante y sometido por las economías más poderosas, la Universidad Nacional Autónoma de México responde con tal asertividad que la coloca entre las mejores universidades del mundo, por lo que este plan –comprometido con la docencia– parte tanto de debilidades y fortalezas como de amenazas y oportunidades para contribuir al egreso satisfactorio de los más de 60,000 estudiantes que atiende el Colegio de Ciencias y Humanidades.
Es importante resaltar que si queremos alcanzar una educación de calidad, es necesario que el Colegio esté integrado por un equipo directivo con propuestas claras y con gran capacidad de liderazgo para convocar, comunicar, informar y conciliar intereses. Ante todo, es fundamental que el Director General asuma una concepción de Gestión Escolar de Calidad, participativa y que tenga los conocimientos, habilidades y destrezas para llevarla a cabo. En el plan que presento -en diez grandes- se proponen acciones y programas permanentes (que responden a necesidades específicas detectadas) en cada sector y que son estructurados de manera sistémica, así como un programa de planeación, evaluación y seguimiento que se concrete en un Plan Estratégico que identifique la misión, la visión, los objetivos, las metas y los proyectos que permitan precisar objetivamente la razón de ser de la próxima Dirección General y de los resultados esperados en función de las metas, objetivos e indicadores propuestos para efectos de evaluación y retroalimentación. I. Situación y contexto del Colegio de Ciencias y Humanidades
Misión La misión del Colegio de Ciencias y Humanidades se sustenta en los principios pedagógicos del Colegio: aprender a aprender, aprender a hacer y aprender a ser, basados en una metodología en la que se hace énfasis en los ejercicios y la práctica de los conocimientos teóricos y donde el docente favorece la autonomía del aprendizaje y una actitud crítica de los alumnos.
Visión
Ser la institución universitaria líder en la enseñanza media superior en el país y reconocida por sus métodos y técnicas innovadoras en la formación de los alumnos, condición que exige contar con una planta académica preparada y comprometida para formar a miles de jóvenes mexicanos que ingresan a este sistema de bachillerato universitario. Valores en su modelo educativo El Modelo Educativo del Colegio de Ciencias y Humanidades se basa en los principios filosóficos que le dieron origen en 1971. Por ello, su plan de estudios está orientado hacia la interdisciplina, el trabajo en equipo, los valores y actitudes éticas, la cultura básica e integral y el ethos universitario que permite apreciar la historia y la cultura de México. Entorno nacional e internacional Pese a las grandes riquezas naturales y culturales de México, vivimos en un atraso tecnológico y en una crisis económica, política y social crónicas, por lo que la educación ha dejado de ser un factor de movilidad social y puesto que los adolescentes buscan certidumbre en sus vidas, esta situación afecta y debe considerarse en el plan directivo del Colegio de Ciencias y Humanidades. En el plano internacional, compartimos la situación de Grecia, Irlanda, España y Portugal, cuyos gobiernos han sido incapaces de salir de la crisis provocada por las decisiones internacionales de los países con tecnologías de vanguardia, que en detrimento del bienestar de los países subdesarrollados, han propiciado el surgimiento de la globalización hasta en las formas de pensar y gobernar mediante el fenómeno de la transculturación. Es en este contexto nacional e internacional en el que plasmo el Plan de Trabajo de la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades 2014-2018, resultado del análisis cuidadoso y responsable de las fortalezas y debilidades del CCH, que en seguida enumero, para luego desarrollar la visión y las políticas adecuadas que permitirán cumplir cabalmente con la misión que nos han encomendado la UNAM y el país. Fortalezas Ser parte integral de la UNAM. La Legislación Universitaria. Personal Académico de Carrera. Un Modelo Educativo de vanguardia. Programas de formación, actualización y superación académica. Docentes becados para cursar la Maestría en Enseñanza Media Superior. Programas de estímulos. Programas de becas para alumnos. Sistema de tutorías y asesorías. La división de grupos en idiomas y matemáticas. Opciones técnicas, programa editorial y programas de apoyo extracurriculares. Sistemas de cómputo. Bibliotecas. Infraestructura física (CECADET). Existencia del INFOCAB. Intercambio con otras universidades. Distinciones como la medalla Sor Juana Inés de la Cruz y Cátedras especiales. Portal Académico en internet. Existencia del departamento de psicopedagogía. Escuela para padres. Debilidades Alumnos desprotegidos económica y culturalmente. Alumnos de nuevo ingreso con deficiencias académicas y procedentes de sistemas escolares autocráticos. Simulación ocasional de trabajo docente. Rezago grave en matemáticas y comprensión lectora. Gran número de profesores interinos. Grupos escolares numerosos. Entorno hostil cerca de los planteles. Comercio ambulante e inseguridad. Alumnos fuera del aula en horas de clases. Falta de personal de vigilancia. Insuficiente mantenimiento de las instalaciones Deformación de los programas remediales como PAMAD y cursos sabatinos. Deficiencia en los procesos de orientación educativa y vocacional. Escasos programas de formación de cuadros directivos. Insuficientes recursos financieros. Falta de compromiso de los alumnos de su aprovechamiento escolar. Propósitos de renovación Considero que dirigir y coordinar la dirección del Colegio implica una gestión con capacidad para construir un proyecto institucional, tomando en cuenta la totalidad de las dimensiones que le dan sentido a nuestro quehacer; por lo que me propongo: Mejorar la docencia cualitativamente, mediante la reorientación de todos los programas institucionales bajo este propósito. Acrecentar la calidad de los aprendizajes de nuestros estudiantes, reducir el nivel de reprobación y mejorar la eficiencia terminal de los mismos. Promover la investigación permanente de nuestro quehacer cotidiano para su mejoramiento; también de difusión y extensión de la cultura con todos los sectores de nuestra comunidad y en especial con nuestros estudiantes. Recuperar el espíritu de la comunidad en torno a los principios del CCH hoy enriquecidos por nuevas realidades y del plan rector de la UNAM, para formar bachilleres que cumplan con el perfil de egreso deseado. Mejorar la relación sustantiva de estudiantes y profesores para el aprendizaje, la enseñanza y la evaluación mediada por una actualización en los programas de estudio. Reorientar la relación del profesor con sus pares, y de éstos con las autoridades y el personal académico administrativo en cada plantel, acordes con el plan de estudios. Ofrecer al profesor los apoyos necesarios y que los padres de familia contribuyan a que sus hijos cumplan con el programa operativo y planes de clase del docente, a través de los tutores. Formar de manera permanente y medular a los profesores, al personal directivo, académico administrativo y a los padres de familia en el ideal comunitario y en las tareas de cada uno de ellos para alcanzar los objetivos formativos de nuestro modelo educativo. En este primer acercamiento, planteo los grandes rubros de atención que requiere la institución sobre los problemas medulares y específicos que requiere el Colegio, independientemente de que cada uno de ellos puede desglosarse en subrubros, con diagnósticos particulares. El colegio hoy: El diagnóstico Tras un análisis pormenorizado de la situación que se atraviesa, una directiva poco cohesionada, problemas de reprobación y deserción, así como de violencia e inseguridad, estoy convencido de que el Colegio puede y debe alcanzar la calidad académica mediante las siguientes acciones: Promover entre la comunidad reflexiones compartidas que nos lleven a innovar la práctica docente. Hacer más dinámicos los procesos académico-administrativos. Propiciar la práctica activa del alumnado en un marco de valores en el que destaque el de mejores ciudadanos. Involucrar más a los padres de familia en la formación de sus hijos y en las acciones que deba tomar la directiva. Desarrollar el bienestar del profesorado y demás profesionales del Colegio. Diseñar y llevar a cabo cursos para los funcionarios de la Institución. Establecer la evaluación certificada en todos los procesos académico-administrativos de la Institución, tal como se lleva a cabo en toda la UNAM. Redefinir el perfil de egreso, en el cual el pensamiento crítico, el conocimiento profundo de la realidad local y mundial, la capacidad de adaptación al cambio y el alto compromiso ético con la sociedad estén presentes. Finalmente, que la educación se centre en el aprendizaje, “Aprender a Aprender”, en la que el trabajo del estudiante es fundamental para su desarrollo y formación ulterior. El colegio del mañana, los ejes: la calidad, los actores, las dimensiones Calidad Una aspiración de toda institución educativa es tener egresados con reconocida calidad académica. El Colegio de Ciencias y Humanidades no es la excepción. Sin embargo, año con año, los seguimientos realizados en las escuelas de nivel superior, a los egresados de diversos bachilleratos, muestran resultados nada alentadores por diversas razones. De modo que –después de cuarenta años, una revisión curricular, un ajuste de los programas de estudio y dos intentos de actualización curricular sin concluir– es de vital importancia plantearse y elucidar si nuestra institución proporciona educación de calidad o sólo se esfuerza por tener un mayor número de egresados. La educación de calidad se define en función de ejes y estructuras que permiten “medir” de alguna manera la calidad y varían de una realidad a otra. Se tienen dos grandes grupos de variables o aspectos que determinan un sistema educativo, las variables exógenas y las variables internas que estructuran el proceso educativo. Las variables exógenas al sistema educativo, expresan las demandas sociales, como la generación y distribución del conocimiento y si se cumple con la exigencia cultural y política de reproducción de la sociedad en la cual se está funcionando: un sistema educativo es de calidad si transmite conocimientos científicos y tecnológicos socialmente válidos y si fomenta habilidades y valores específicos que hagan posible una sociedad con individuos democráticos, solidarios, cambiantes, productivos y participativos. En el ámbito interno de la institución hay varios elementos que determinan la educación con calidad de una escuela, sin embargo, al ser un proceso social, los factores humanos toman una relevancia capital. Está reconocido que la participación y compromiso del profesorado son factores decisivos para lograr educación con calidad. En cuanto a las variables de orden interno la mayoría de los autores* señalan cuatro grandes grupos de factores de la calidad: 1) los recursos materiales, 2) los recursos humanos, 3) la dirección y gestión administrativa y académica del centro y 4) aspectos pedagógicos. * Tomado de Pere Marquès, op.cit. El CCH con educación de calidad El CCH tiene un proyecto educativo que por muchos años se ha considerado vanguardista. Sin embargo, pese a todo lo hecho en estos cuarenta y un años y a la luz de la situación actual, ¿en dónde quedó el proyecto innovador, de educación con calidad que estuvo en el imaginario de muchos de los fundadores? ¿qué se ha hecho mal o se ha dejado de hacer? ¿cuál es la definición de calidad en nuestro caso? Sobre todo, ¿hacia dónde orientar los esfuerzos para retomar el camino para ser una institución que imparta educación con calidad? En síntesis, para elevar la calidad ante este panorama claro del nivel en que se encuentra el CCH, se requiere de un conjunto de definiciones y de acciones que den congruencia a la institución con las demandas sociales y que internamente se logre la consistencia entre el discurso y la realidad del aula, entre lo prescrito y el fenómeno educativo en sí. Propuestas para que el CCH eduque con calidad En el momento actual, se considera que se encuentra en proceso una actualización curricular y de programas de estudio, así como tres centros de acción con el propósito de aumentar el número de egresados, se pueden señalar como ámbitos para focalizar las acciones para elevar la calidad educativa, las siguientes: La gestión directiva-administrativa La gestión directiva debe conocer a profundidad el proyecto educativo y el plan de estudios; tener claridad en las metas académicas a lograr; propiciar una vida comunitaria democrática y participativa; generar un ambiente que favorezca el desarrollo personal y mantener una buena comunicación con la comunidad, que de transparencia a la gestión y genere confianza. Por su parte los recursos y materiales didácticos son muy necesarios para educar con calidad, pero deben ser congruentes con el modelo curricular y cumplir con una calidad mínima. Los directivos, como personas con interés y formación académica, tienen la obligación de proporcionar los medios, recursos, servicios, adecuados al desarrollo de un educación de calidad. De capital importancia es la definición del perfil del docente del CCH, para poder describir mejor los mecanismos de ingreso, las formas de evaluación de su trabajo y las características requeridas para avanzar en la carrera académica. Con relación al eje pedagógico se hace necesario revisar la consistencia entre los diferentes documentos producidos en torno a las características definen al sujeto de enseñanza; cómo aprende el que aprende; cómo enseña el que enseña y cómo se estructura la propuesta didáctica. Los actores La concreción y éxito del Plan de Trabajo requiere del compromiso de los actores involucrados en la consecución del mismo. Estudiantes En el Modelo Educativo el estudiante tiene mayor participación en la construcción de su aprendizaje con acompañamiento de los profesores en toda su trayectoria escolar; la responsabilidad del aprendizaje recae principalmente en el alumno. La intención de formar estudiantes activos y participativos es eje en el perfil del egresado competente que el CCH desea formar. Profesores El docente es un facilitador de los aprendizajes con la obligación de crear las condiciones adecuadas para el logro de los mismos y el desarrollo de competencias, debe realizar actividades como facilitador, tutor, asesor, gestor y evaluador de los aprendizajes. Desde su creación el Colegio se planteó la misión de ser un laboratorio de formación de profesores. Directivos Para Llevar a cabo el Plan de Trabajo es imprescindible contar con una gestión educativa socialmente responsable, en la que se hace evidente la necesidad de una organización horizontal que responsabilice a todos los actores de la institución en el cumplimiento de sus propósitos, incluyendo al personal directivo. Personal administrativo Los trabajadores administrativos son una parte fundamental de la comunidad, por lo cual se propiciará un diálogo con ellos y sus representantes sindicales, con el propósito de renovar el compromiso con el desarrollo del Colegio. Estimular una nueva cultura laboral, apoyar su capacitación y fomentar la corresponsabilidad en el logro de objetivos y metas de la institución. Serán tareas fundamentales para la gestión educativa del Colegio: Impulsar el trabajo en academias en todos los ámbitos del quehacer de la Universidad para lograr la sinergia que requiere el CCH. Fomentar permanentemente la planeación participativa en las dependencias académicas y administrativas, que incorpore formas de atención y relación entre lo académico y lo administrativo en áreas estratégicas. Favorecer la toma de decisiones sustentada en sistemas de información que coadyuve eficientemente a la identificación de fortalezas y áreas de oportunidad institucionales. Promover redes sociales que vinculen la docencia, la investigación y la extensión entre los diferentes sectores. Impulsar el desarrollo de la infraestructura requerida en donde predominen principios que promuevan la sostenibilidad ambiental. Fomentar un adecuado clima organizacional en la institución, donde todos los actores gocen de seguridad personal y profesional, y un ambiente laboral propicio al desempeño creativo e innovador. Impulsar la actualización sistemática de la normativa institucional con base en las necesidades del Modelo. Establecer un sistema integral de evaluación del diseño y operación del Modelo que oriente el trabajo hacia el logro de sus propósitos. Promover la evaluación interna y externa por organismos universitarios e internacionales, y socializar ampliamente los resultados obtenidos entre la comunidad. Promover la transparencia de todos los procesos institucionales. Fomentar el compromiso institucional de las dependencias en la implementación del Modelo en todos niveles y en las diferentes áreas. Las dimensiones Las dimensiones en las que se basa el presente Plan de Trabajo son: La dimensión pedagógico-curricular, que hace referencia a los fines y objetivos específicos y la razón de ser de la institución en la sociedad. La dimensión comunitaria, que apunta a las relaciones entre la el Colegio, específicamente, entre la comunidad local y los planteles, así como la relación con los padres de familia. La dimensión administrativa-financiera, que incorpora el de los recursos necesarios, disponibles o no, con vistas a su obtención, distribución, articulación y optimización para la consecución de la gestión de la institución educativa. La dimensión organizacional-operativa, que constituye el soporte de las anteriores dimensiones proponiéndose articular su funcionamiento (la reestructuración de los cuerpos directivos). II. Acciones para alcanzar una educación de calidad en la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades El proyecto que presento tiene como antecedente un cuidadoso diagnóstico para identificar algunos de los principales problemas y obstáculos con la finalidad de formular propuestas y procedimientos que permitan resignificar y propiciar un mejor cauce a las tareas de la enseñanza, el aprendizaje, la coordinación de la gestión académica y las relaciones laborales en el marco de los programas de la UNAM y del modelo educativo del Colegio de Ciencias y Humanidades. El Plan de Trabajo para la Escuela Nacional Colegio de Ciencias y Humanidades está diseñado con base en políticas orgánicas, que responden a un proceso de calidad total, por lo que inicio con la detección de problemas y deficiencias, para, en seguida, plantear las líneas de acción. En este proyecto educativo establezco acciones tendientes a vincular los problemas pedagógicos -que son todos los inherentes a la acción formativa de alumnos- con los problemas organizacionales y que considero que son todos los correspondientes a la administración y desarrollo de la institución. Los temas del Plan de Trabajo, cuyo eje central son los aprendizajes y la formación básica de los alumnos, se articulan en procesos de acciones destinados a la obtención de propósitos comunes y en los que intervienen múltiples actores, cuya actividad diversa debe considerarse y promoverse en su unidad e interdependencia. Los programas que se requieren para alcanzar los propósitos y dimensiones son los siguientes: 1. Atención a los alumnos El propósito es el de disminuir considerablemente la deserción y la reprobación y aumentar la calidad académica en un mayor número de alumnos, para ello se requiere apoyar a la formación integral de los alumnos, explicar el Modelo Educativo desde que ingresan y promover más actividades académicas, culturales y de educación física, con la intención de evitar las actividades nocivas. 2. El profesorado y sus métodos de enseñanza Contribuir al mejor desempeño de los profesores, para lo cual será necesario promover el incremento de la planta de profesores de carrera con el fin de dedicar parte de su tiempo a distintas actividades que apoyen los procesos de enseñanza y aprendizaje; entre éstos, la actualización y superación académica, tareas extracurriculares y labores de investigación sobre la práctica docente. 3. Revisión de Planes y Programas de Estudio con relación a sus contenidos Continuar con la revisión de los Programas de estudios mediante una comisión de recapitulación que revise la cantidad de contenidos y las estrategias de aprendizaje para buscar el consenso con el fin de que se aprueben los programas en los cuales la aceptación sea mayoritaria. 4. Investigación orientada al aprendizaje significativo del alumno El propósito es que el Consejo Técnico y los Consejos Académicos establezcan líneas de investigación, orientadas a lograr un aprendizaje significativo de los alumnos en las distintas disciplinas. Para ello se propone crear el Centro de Investigación Educativa, en el que se estudien, analicen y busquen las respuestas a las múltiples variables de las problemáticas pedagógicas y académicas de la Institución. Participarían profesores de carrera y de año sabático. 5. Gestión y planeación para el trabajo académico La gestión Uno de los factores básicos para propiciar la calidad educativa en el CCH es el estilo de dirección y su apoyo decidido al fortalecimiento de los organismos colegiados para, de manera conjunta, diseñar las medidas indispensables para tal objetivo. Estoy plenamente convencido de que el cargo de Director General del CCH no es sólo para representar una instancia unipersonal, sino que tiene como encargo velar porque los procesos educativos se produzcan de una manera coherente y complementaria. Es evidente que el director debe promover una serie de tareas de motivación, de coordinación y de conducción de las actividades de todos los integrantes del equipo, en función de los objetivos y metas de la Institución. La planeación Institucionalizar, en todos los niveles, los procesos de planeación, seguimiento del desarrollo y evaluación de los procesos académicos de manera integrada. Planear de manera integral los programas para que todas sus acciones estén orientadas al mejoramiento de los procesos de enseñanza y aprendizaje. 6. Adecuación integral del aparato académico-administrativo a los requerimientos del plan académico e Infraestructura y equipamiento. Para avanzar en la reorganización de las Direcciones, es más ventajoso echar mano del concepto de proceso entendido, para nuestro caso, como un conjunto de acciones coherentes y secuenciadas que producen un valor agregado de orden educativo en los alumnos. La reorganización de las Direcciones de los Planteles debe inscribirse necesariamente en el mejoramiento del aprendizaje de acuerdo con los nuevos programas del Plan de Estudios. Para su reorganización, en consecuencia, debe adoptarse una visión de la totalidad de los procesos de la institución y no revisarse por partes ni reducirse a la solución de algunos problemas específicos. Infraestructura y equipamiento Contar con una infraestructura que apoya los procesos de enseñanza y de aprendizaje con instalaciones, materiales didácticos y equipos adecuados a los contenidos de los cursos y el proyecto educativo. 7. Seguridad y protección comunitaria en los planteles Tener un banco de información sobre los problemas que aquejan a los planteles, indispensable para afrontarlos con más herramientas. La Gobernabilidad es responsabilidad de toda la comunidad. Las diferentes acciones para mejorar la Gobernabilidad requiere la participación de todos los sectores de la comunidad: alumnos, profesores, padres de familia, autoridades internas y externas, vecinos y trabajadores. 8. La Educación Física y las Opciones Técnicas La Educación Física Impulsar en los estudiantes desde el primer año la Educación Física y el deporte para coadyuvar en su formación integral y en un mejor desempeño en sus tareas académicas. La actividad física para el adolescente le permite hacer conciencia de su cuerpo, así como el interés por mejorar su aspecto. Los alumnos que han practicado alguna actividad física, son más seguros en sus movimientos y en sus habilidades lo que les provoca un mejor estado de ánimo y autoestima y mejor disposición hacia el estudio. Las opciones técnicas Incrementar el número de Opciones Técnicas en los planteles donde la infraestructura lo permita y actualizar los programas de estudio de las que actualmente están vigentes. 9. Las actividades artísticas y culturales para el desarrollo del adolescente Impulsar un programa amplio de talleres, conferencias, ciclos de cine, artes plásticas, teatro, música, danza, creación literaria, tradiciones populares, cultura ecológica, ciencia y tecnología, entre otras. Con la combinación de estos programas y acciones se contribuirá al desarrollo cultural y a la formación integral de los alumnos, pues mediante estas actividades artísticas y culturales se involucran aspectos de carácter formativo, comunicativo, estético y lúdico-recreativo. 10. La creación del Seminario de Enseñanza Media Superior Al igual que el Seminario de Educación Superior propongo la creación del Seminario Enseñanza Madia Superior (SEMS) donde participen profesores de reconocido prestigio, tanto de la ENP como del CCH, y se organicen líneas y proyectos de investigación mediante el concurso de profesores de distintas disciplinas analicen los factores sociales, científicos y tecnológicos que influyen en el cambio institucional de la EMS y en particular del CCH y la ENP, cuyo propósito fundamental es el mejoramiento de los aprendizajes de los jóvenes estudiantes de este ciclo. CONCLUSIÓN Uno de los factores básicos para propiciar la calidad educativa en el CCH es el estilo de dirección y su apoyo decidido al fortalecimiento de los organismos colegiados para, de manera conjunta, diseñar las medidas indispensables para tal objetivo. Estoy plenamente convencido de que el cargo de Director General del CCH no es sólo para representar una instancia unipersonal, sino que tiene como encargo velar porque los procesos educativos se produzcan de una manera coherente y complementaria. Es evidente que el director debe promover una serie de tareas de motivación, de coordinación y de conducción de las actividades de todos los integrantes del equipo y de la comunidad, en función de los objetivos y metas de la Institución. Mtro. Ernesto García Palacios
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